Y como del imbricado
amor
del polen con el polinizador
germina el jardín de las flores del
insondable mundo de los
anhelos
insurge el hado del amor haciendo
sus embelesos de locuras
para llevar
a los amantes de la
vida a crear
el mejor vivir de la vida
-jaced, de Venezuela
A la mujer… pero aquella
que sabe hacerse madre
Zaira, la Nona…madre,
qué días sin saber de ti!
como a luna vistiendo
su ajuar de luna nueva…
pero el mismo viento de tú vela
me cuenta que la has izado para irte
a navegar al alto cieloazul después de
habitar más de cien años en la Tierra
¡cieloazul, vecindario del corazón, que
se encuentra entre hondonadas, alturas
y extensas llanuras del alma del Ser!
desde donde haces la siembra
de amor en los corazones de
los amantes de la vida
como a luna vistiendo
su ajuar de luna nueva…
pero el mismo viento de tú vela
me cuenta que la has izado para irte
a navegar al alto cieloazul después de
habitar más de cien años en la Tierra
¡cieloazul, vecindario del corazón, que
y extensas llanuras del alma del Ser!
desde donde haces la siembra
de amor en los corazones de
los amantes de la vida
Y jineteando este mismo viento
éste ramo verde de letras para
toda la eternidad en nosotros
porque tú eres nuestra madre
Y a ese cielo azul del amor en
seguiremos enviando nuestros
recados que son nuestros mismos
sueños y esperanzas para que tú
amor los siga empollando
Luna viajando a luna nueva/ Mery Sananes |
Y es que Zaira, madre permanente, ahora
convertida en esencia que no se ve, pero
si la ve y la siente el corazón de
todoser que ama y que le ama
alta navegación! porque ya ha
dejando su amor sembrado en
cada amado la porción de amor
que le corresponde poseer para
que pueda alcanzar vivir la vida
Y simplemente, ahora navegas en
ese azul luz de los mares del Alma
llevando el equipaje de sus pavesas
de puro amor para encenderlas igual
cada lucero seguir con su tarea
repartidora de amor a la Tierra
…azul luz, alba de amor
abriéndose en aurora!
Zaira curando con amor al colibrí |
Así, madre Zaira ha
aumentado sus quehaceres
junto a las tantas madres que
han ascendido a ese azul para
suplirle el amor a la Tierra que
por siempre la haga florecer y
hacer llover amor a cada ser
que aman y que le aman y
con ese amor ser nutriente
para que nunca el amor
deje de existir en la Tierra
Entonces, Zaira la madre,
la que dio vida al colibrí,
la poeta, médica, abuela,
la dulce hija, por siempre
anidando en cada ser amado
en cada niño que ven sus ojos
en cada flor del jardín cósmico
cada nube de ese cielo azul y en
el vuelo del colibrí que lo navega
…su atmósfera de amor
siempre abrazándonos!
Y madre Zaira!
para verte, sentirte, unirnos a ti
sólo tenemos que mirar dentro
de cada corazón de cada alma
en cada grano de polen en cada
nube en cada vuelo de colibrí y
ahí estás amorosa mirándonos
con tu sonrisa de luz en alba
para seguir dándonos tú amor
Y ahí, mujer humilde, entre
nubes de azul celeste en
constelación de madres
como estrellas alumbrando
en esencia en espíritu puro
se te vé contemplándonos
con tú sonrisa luz de amor
manando “esa música
que viene del alma”
Y de madre siempre “esa
música que viene del alma”
el Adagio en violín de J.S Bach
trae a mi mente aquel recuerdo
tú conversando con mi madre
sobre cómo se puede ser madre
en este planeta Tierra cada vez
más poblándose de sepulturas
pero de vuestras rebeldías fluye
“esa música que viene del alma”
para extinguirlas y en su lugar
plantar sembradíos de alegrías
nubes de azul celeste en
constelación de madres
como estrellas alumbrando
en esencia en espíritu puro
se te vé contemplándonos
con tú sonrisa luz de amor
manando “esa música
Y de madre siempre “esa
el Adagio en violín de J.S Bach
trae a mi mente aquel recuerdo
tú conversando con mi madre
sobre cómo se puede ser madre
en este planeta Tierra cada vez
más poblándose de sepulturas
pero de vuestras rebeldías fluye
“esa música que viene del alma”
para extinguirlas y en su lugar
plantar sembradíos de alegrías
Ahora, airosas navegan en
esa cosmosidad azul abriéndole
páginas de sus historias al hombre
sus eternas lecciones de vidas como
“esa música del alma” enseñándole´
vida de tumbas… y abrir corazones
que saben llegar al vivir de la vida
Y a las madres las amo con
intensidad de luz de estrellas
que también manan esa música
como ellas igual lo hacen!
Anidamos en las alas de la alegría…
aún en la que se quedó en la tristeza
aún en la que se quedó en la tristeza