domingo, 7 de febrero de 2021
Amigo Héctor...
La lágrima, tantas veces
Amigo Héctor, al enterarme…
Y filosofante tu voz sabia
Anidamos en las alas de la alegría
jueves, 31 de diciembre de 2020
Retrato de una madre
Los vocablos en versos
humildad y sencillez
honestidad y ternura
abnegación y bondad
belleza y verdad
libertad y justicia
solidaridad y amor
sustantivan a la mujer
haciéndose madre
¡luego en sus hijos
sintetizan todo!
Maternidad y amor |
Y en
estos díaspensando
en mis hijas yen
sus hijos testimonio ala
madre Carmen Susana
Y en
estos díaspensando
en mis hijas yen
sus hijos testimonio ala
madre Carmen Susana
Y en estos días
Oda a la alegría de unamanecer que nunca ha
llegadonavidad! próspero y feliz año nuevo!burbujas de ilusiones que
por siglosvienen repitiéndose y que de
tantorepetirse a la larga
terminan en unmundo de hombres frustrados y sinsentimientos humanos colectivos…pero la esperanzano cede su puesto!
Una vida de puros espejos
rotos
reflejándonos en trozos
esparcidos y
nuestra alma huyendo como
ánima
asombrada ante hombres
opulentos
en privilegios y riquezas y
hombres
opulentos en pobrezas
aunque con
esperanzas en sus corazones
Vida impuesta fluyendoelipse de anhelos de
ilusionescomo columnas de humos queen el tiempo se van
evaporandomientras el amor el vivir la pazy las esperanzas buscanotra vida donde anidar
Una vida de puros espejos
rotos
reflejándonos en trozos
esparcidos y
nuestra alma huyendo como
ánima
asombrada ante hombres
opulentos
en privilegios y riquezas y
hombres
opulentos en pobrezas
aunque con
esperanzas en sus corazones
Como nunca antes lamadre alerta su amorexpandiendo su regazoque guarece a sus hijos detorrenciales inclemencias…y entre rendijas deesta vida impuestala madre logra vivir!
Como la mía, madre siempre!
que esta vida hizo analfabeta
en el acto de leer y
escribir pero
alfabeta en el acto de la entrega
de su corazón puro y muy sabia
sorteando la odisea de la
vida
…en su corazón sólo
amor para sólo amar!
Y recuerdo su gracia que
la hacía maravillarse
viendo a las
letras como hormigas
escribiendo
su nombre Carmen Susana! y al
oírla en la voz de sus
hijos era
su alegría toda su vida
viviéndola desde niña
Y entre sus risas silentes
como
un bajo continuo de órgano solía
exclamar…y en esas hormiguitas
en filas dicen, Carmen Susana?
y ríe en gozo la niña que
era
lo sigue siendo y lo será
madre siempre!
Madre siempre
Y poetisa en letras de versosde canciones muy dentro de
sídonde ponía volar sus
sueñoscuando veía una luna
crecienteo luna de plenilunio o en
mayola constelación cruz del sur oen aquellos dulces
aguacerosque en melancolía veía caer…su silencio uncanto a la vida! Y cada noche bajo luna consu gigantesca fe ponía alsereno sus remedios quepreparaba con su amorpara curar a los hijoslos suyos y los de otros…los hijos sueje de la vida!
Luna creciente/Foto Mery Sananes
Y cuando pilaba el maíztarareaba canciones al sonde la subida y bajada del
pilónalegre como los picos y
cáscarassaltando dejando limpio el maíz Y también en voz pianísimacanturreaba sacando
liendrasy piojos a sus hijos tan
pacientecomo si limpiase de pajas al
maízpara mandarlos limpio al
colegio Y fue artesana sin proferir
quejasprimero haciendo muñecas de
traposy el duro tejer alpargatas
luego másduro fabricar centenas de arepas ensu artesanal fogón de leñas comofulgurante estrella roja para elsustento diario de la
familia Y cómo irradiaba ternura ensu pequeño jardín haciendoflorear a sus trinitarias cayenasflor de baile siemprevivas daliasjunto a la hierba buena la sábilala menta el cilantro el oréganoacompañantes permanentesen el arte de su cocina Y estas labores burlandoesa pobreza en asediotestimonian su vocaciónde ser una inmaculada madretanto por los instantes
felicesde parir a sus hijos como
porsus actos de entregar amor
aquiénes llegaban a su
regazo…y en ese duro laborarsiempre su risa semejandoel floreal de una cayena!
Flor cayena
Y qué dulzura destilaba su
voz ensus rezos a sus muertos queridosen las tardes llamando a la
nocheque se hilachaba en
melancolíascomo un rumor de aguas de
mar Y después de su duro trabajoplácida fumaba su pipa
viendoel volar de sus
pensamientosen anhelos enhebrándose en
elhumo azul ascendente al
cielobuscando el plenilunio de
luna
Luna plenilunio/Foto Mery Sananes
Y bajo esta luna se ve su perfilirradiando luz de sus
propiosrasgos biográficos un
retratode madre perenne entregadaal vivir aun en momentos
durossin nunca perder la ocasión
deentregar su amor a los que
amaen su diaria dura
existencia…bajo un canto a la capelaave madre en vuelo!
Anidamos en las alas de la alegría
aún en la que naufraga en la tristeza
miércoles, 18 de noviembre de 2020
Trinitarias
Incuestionable
verdad
la belleza del canto del
pájaro ruiseñor al amanecer
como también el rocío sobre
los pétalos de la flor trinitaria
o igual la belleza del amor
que hace que yo ame
y en pasión me amen
…la madre lo
testimonia!
Y sueño
vivir la vida...y ese sueño de
tanto soñarlodebe llegar hacerse realidad
Sea en sueño o en realidad
mi pensar andando por valles
montañas o mares lleva en
cuerpo y alma a mi madre y
a sus flores trinitarias
como
el mismo cielo a sus azules
surcados por rutas de aves
Y con ella como ofrenda
paseando ensimismado
por ese largo camino azul
paso sembradíos de flores
trinitarias tras trinitarias
ellas sembrándose en mi
yo sembrándome en ellas
estallando en sus racimos
blancos rojos naranjas
violetas y rosas
…pasión por vivir!
Y en cada ramo veo su alma
su rostro estallando en
risa
como cada trinitaria en
la gama de sus colores
testimoniando lo bello
la madre misma!
la flor misma!
La oigo siento su música y
descendiendo de cada ramo
envuelto en la aureola de
sus
perfumes y de sus colores
ella
alegre se pone andar a mi
lado
…en acordes yo le cuento y
en sinfonía ella me cuenta!
Y allá lejos como nubes
veo venir frescas alegres
mis otras madres con los
desvelos por sus hijos
entre
lluvia de sus anhelos
cayendo
como las hojas del otoño
llamando al invierno
… madres siempre
tras suyo hilera de
vivencias y amores
por los hijos!
Y festivos nos juntamos
comunión en una sola
caminata
haciendo ramilletes de
flores que
timbramos de deseos venturanzas
y multiplicidad de
remembranzas
ofrendándolos a cada ser querido
encuéntrese donde se
encuentre
…y durante la conversa a
cada quien le guindamos
una flor de trinitaria como
si les diéramos un beso!
Madres siempre…por siempre!
que con el ardor la pasión de
su amor
afirman su derecho a ser la
fuente de
la historia humana que aún no ha sido
pero que algún día tendrá
que serlo
bajo el encendido taller de
su pasión
…madre existe en el
corazón de la vida!
Y por doquier las gentes
voltean
viendo nuestra chispeante caminata
señalando nuestras alegrías
en tropel
como pañuelos blancos en
vuelo que
muestran en sus puntas la esperanza
y asombradas por tantas
risas sueltas
en picardía cuchichean
entre ellas
Qué caminata infinita
donde madres e hijos
renacen…viven como
las mismas trinitarias
en incendio de colores
entregando su polen
fructicultor al viento
Y sin que nadie lo proponga
al término del trayecto
andado
entre abrazos y besos a
granel
trinitarias y madres se retiran
atender a sus asuntos
azules
entre gamas crepusculares
…se ven siluetadas en azul
confundiéndose con aves!
Madres y trinitarias dejan
flotar
las estelas de sus existencias
con
sus perfumes sus espíritus
que se
testimonian en cada corazón
que
llaman a que no dejemos de amar
¡cada pétalo un chasquido de beso
que van dejando hondas huellas
tallando el caminar por la vida
para los que vienen detrás!
Nítido el chasquido del
beso
de la madre en la mejilla
del hijo
de las hojas pétalos de la
trinitaria
lentamente cayendo en el
estanque
hasta que por fin llega la otra vida
poniendo en su mesa a cada quién
a cada cosa cada hacer en su
lugar
todo dirimido por el amor
Y ese beso esas hojas
develando
antiguos mandatos de vivires que
esta oscura vida los ha
cancelados
¡amar al prójimo como a mí mismo
amaos los unos a los otros y amor
de madre para que exista la vida!
…testimonios de la madre
para esa historia humana
que de tanto nacer con sus
hijos ella está fundando!
Anidamos en las alas
de la alegría…
aún en aquellas naufragando
en la tristeza
Ediciones jaced
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