viernes, 3 de diciembre de 2010

Y la canción palila, palila... Carmina!



Y Luis Luksic,
un  gigante abuelo de espesa barba blanca,
poeta, pintor, cuentacuentos y titiritero una vez dijo
“Un día el hombre hará correr un ferrocarril sobre un rayo de luz…”
pero  esto no lo entendió el mundo
y como este mundo niega la risa
un día pintó un “caballito multicolor” y también lo puso a correr
sobre rieles de luces para alcanzar la risa y traérsela al mundo

Pero hasta el presente nadie sabe dónde está el ferrocarril
ni dónde anda el caballito multicolor
solo en noches de luna llena de diciembre se oye el rodar de ruedas
y el relinchar de un caballito galopando praderas.
También se oye decir que quien aprenda asomarse
a las honduras de las pupilas de los niños podrá ver
al ferrocarril correr y correr y al caballito correr y correr
y en sus manos traen a la risa sobre un rayo de luz


Cuando naciste muchos cielos se encendieron
todavía siguen sonando el fragor de fiesta
acordes de violonchelo con acompañamiento de piano
continúan en concierto la composición de la canción
y de sus compases continuos en clave de sol mayor
sobre pentagrama al mundo, nítida la melodía “Palila”
que en eco se repite en la elipse de las estaciones
Palila!
Palila!
princesita
Carmina!
de ojos grandes que quieren beberlo todo
niña de dulce sonrisa
fogata alegre con chispas de melancolía
donde ya puja el brotar de la poesía
para aromar a quien se le acerque

Y de tiempo en tiempo se nos cristaliza en
primavera
verano
otoño
invierno
y vuelta otra vez a primavera
cada vez más verde
más florida
como inagotable fuente de clorofila
que a todos ofrenda su néctar de vida
y abejas
mariposas
colibrís
pájaros
y nosotros, que van a beber


Y diciembre con su flor y luna creciente
vistiéndose y desvistiéndose en sus pétalos y ópalos
para hacerse su mejor traje luminoso
la ve inclinada sobre las puntas de sus pies
para endulzar aún más su peldaño de tres años
y en risa sobre ellos pide al horizonte traer su eco
para hacerlo más sonoro en multitudes de cánticos
y como velero lo vuelve a la mar para alta navegación
ahora un solo coro
Palila
Palila
Palila
Carmina!
por todos los senderos del universo
y no habrá rincón en ninguna estrella
que no sepa: Carmina cuenta el cuento de sus tres años!
para seguir como escalera cósmica y seguir
seguir, y seguir
sumando tiempo
llenándolo de la alegría de su vivir


Y un abuelo que tiende su mirada
envuelto en lejanía con la biografía en sus manos
sentado en cualquiera roca de cualquier costa
de cualquier mar pero de un intenso azul bajo estrellas
o sol de mediodía o tarde que se hace crepúsculo
sobre playas que duermen donde suelta su alma
Carúpano
Playa Caribe
o Bretaña
bajo la neblina que lenta cae sobre el mar como adagio de chelo
salpicada de vuelos de gaviotas y pelícanos de mar
recibe trocitos de ese eco, y oye: de fiesta ésta Carmina!
y  él también ríe en su rostro humedecido.


Y el eco repite en el viento marino
Palila!
Palila
Carmina!
tres pétalos amarillos en la risa
sobre nubes blancas entretejiéndose
niña flor de amanecer que corre y
corre sin parar.


BALLET CLÁSICO DE MOSCÚ, EL CASCANUECES: ADAGIO

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