domingo, 17 de noviembre de 2019

Lágrimas

Y las gotas de lluvias
besando las hojas o pétalos
se transforman en rocíos
que  son como sus risas
Igual a las lágrimas
que besando el alma se
cuajan en gotas de alegrías
anunciando la felicidad del
hombre viviendo la  vida


Lágrimas de oro/Gustav Klim
Desde niño contemplo
la inmensidad del mar  y
sobre su enjambre de oleajes
miro sus horizontes lejanos
vertiéndole lágrimas de alegrías
cuando siento su cantorumor
formando parte del mío y
juntos en júbilo navegamos
por todo su cuerpo azul

O le entrego las lágrimas de mis
melancolías o las de mis tristezas
cuando solitario el amor deambula
por esos parajes azules del horizonte
buscando puertos destinos de corazones
que le acunen igual cuando era aquel niño o
aquellas dulcísimas de la irrupción del llanto
cuando se siente hondo la fuga de la vida
como si la esperanza abandonara el alma
al contemplar el rostro de la querida tierra
que herido va llenándose de sepulturas


Y todas ellas se hacen mareas
fundidas a las suyas montándome
a las crestas de sus olas yendo
con sus espumas bañar su playa oro
animosas a recuperar esa esperanza
bajo ese sol que miro dibujando sus
luces horizontes o a los estallidos de
su alegre paleta de crepúsculos

Y qué incendio luminosidad de
sus noches de luna plenilunio
sintiendo ese gotear de luces
que sobre el piano del alma
tocan músicas acuáticas

Foto/Mery Sananes
Entonces constato que
la vida siempre está allí
para saciar toda carencia
del cuerpo y del alma de
ese hombre que aún no
decide cuándo dará fin
a su milenario naufragar

Y el alma asomada a su
rostro se estremece por el
susurro del llover de hojas
sobre el viento llevándoselas
despidiendo al otoño que junto
al fértil invierno sustituyéndole
van a labrar la resurrección en
cantos que las chicharras en
flautín solistas entonan
llamando a las aguas para
testimoniar que la vida
siempre está gestándose

Entonces es cuando adviene
una honda melancolía con el
caer de la lluvia porque hondo
se siente las carencias en la vida
y la serena alegría para fertilizarla
aún está muy lejos como perdida
…y es el humano pugnando
por nacer a la vida!


Foto/Mery Sananes
Y cuando por fin ocurra el parto
habrá de oírse su voz en concierto
o a él mismo como viola solista
sublime dialogando con orquesta
y el universo en silencio de gozo
solemne escucha sin interrupción
…por fin la fantasía dejará
de ser una mera utopía para
prenderse a la vida!


Y ese lánguido gotear del
llanto perlando al rostro o
la lágrima solitaria asomándose
bajo los entreabiertos párpados
o ese chasquido del beso que
la madre entrega al niño o su
amor que le explota en ternura
bañando todo su cuerpecito o
esa alegría tímida de la inocencia
o el llantoalegría del niño al nacer
mensajeros  de la metamorfosis del
humano en las entrañas del hombre
…y es lento su parto porque sabe que
debe llegar a todo rincón de la vida


Y será una coral de alegría
o concierto cantata que festeja
la irrupción de la vida o porque
al fin ha cesado tanto llanto que
a la vida le han obligado manar
…y la vida de este hombre se
labra de llantos entretejidos
entre solitarias alegrías

Y en esa antigua lucha por la vida
el porvenir parirá el momento en
que empezará amainar el llanto
lánguido trocándose en melancolía
hasta que se hace alegría por siempre
y ahora la alegría vendrá de la alegría
…tiempo del amor
naciendo siempre del amor!



Anidamos en las alas de la alegría…
aún en la pluma que se refugia en la tristeza
Ediciones jaced








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