Y llegaremos a
un tiempo de vida
donde nuestro
propio hacer
creará una
historia de un vivir
real verdadero
no alienado
amando a todo
lo que haya que amar
en un entorno
de amor justicia belleza
Y cuando
llegue la necesidad de morir
partir a otra dimensión
de la vida
Ser energía
espíritu luz en el cosmos
Y así lo será cuando
el ciclo natural
de la vida
llega a su feliz término
entonces bajo
efluvios de sol y luna
dulcemente en
las ondas de los acordes
de una sonata de violín de Bach nos iremos
canturreando alegre
porque hemos vivido
Aquél 31 de mayo de 1999
Carmen Susana mi madre
amó con pasión la vida
amó todo lo que había gestado con su amor
y puso toda su voluntad de madre
para seguir siendo Ser en cuerpo y alma
mantenerse integrada para seguir amando
hasta que su ciclo natural de vida
concluyera en comunión con su voluntad
pero tuvo que emigrar hacia otra dimensión
obligada por el azar de la cruel historia que padecemos
porque toda muerte en su dominio es una imposición
pero ella con trabajo y amor construye su propia historia
que logra que ella misma quede prolongada en sus hijos
y en bajel hecho de sus manos y corazón izó vela
para surcar como marinera los confines azules
y vuelve a su origen cósmico de donde vino
para vestir quantum de luz
de estrellas
y deja en mis manos en mi corazón
en mi alma o espíritu
su amor
su ejemplo creador
esa historia que en su tiempo de vida hizo
aromada con su querida flor azucenas
Y sobre la Tierra fueron días noches años
lunas y sol en infinitud de naceres y ocasos
tiempo de existencia que contiene mi vivir
un novenario cordón umbilical
que construyó todo lo que hoy soy
pero en aquél 31 de mayo de 1999
esa ajena historia me lo rompe en mis manos
en mi corazón en mi alma
y adviene la ausencia física de su roce
de la sonoridad de su voz
de la luz de sus ojos
de la cobija de su risa
del sostén de su
hacer
ahora solo ausencia de su presencia física
que no fue un acto de su voluntad de madre
pero ahora ella se hace viajera permanente
en la tierra
en el viento
en el mar
en el cosmos
en mi espíritu donde su espíritu me toca
y me habita ahora como su ventana casa abierta
de la Tierra
al cosmos y del cosmos a la Tierra
ruta de navegación que recompone el cordón
umbilical
pero ahora por un tiempo infinito donde me
prolonga
y desde esa dimensión astral mantiene mi vivir
Y ahora 31 de mayo del 2014
noche del primer gajito creciente de luna de mayo
que alguien llamó luna de
promesa de vida en un cielo
de noche cerrada que luego pasa a ser de azul nocturno
poblado de pocas estrellas y ahora entre ellas habita
y a ese cielo me asomo casi todos los días y noches
desde mi espíritu donde está el suyo tocándome
para ir al reencuentro de su lluvia de efluvios
que en amanecer es neblina de gotitas de rocíos
y que gota a gota balsaman toda mi existencia
y me hace decirle al cosmos “yo existo”
y queda en mis manos en mi corazón
en hondo surco sembrado la raíz de su amor
junto a su símbolo la flor de azucenas
para decirme en la neblina de su perfume
“hijo también contigo existo”
Y bajo este perfume de azucenas
que en halo envuelve su luz de estrellas
ahora vuelve la resurrección
de su roce que me aviva
de la luz de sus ojos que me enciende fogatas
la sonoridad de su risa que me prende alegrías
el viento de su voz que me es guía permanente
su incesante hacer
que continúa alimentándome
en síntesis todo este flujo que sigue manando
su espíritu en mi alma
el mío en el suyo
ahora uno solo en el cosmos donde ella habita
y vuelvo a revivir aquella flor blanca que sembré
junto a su corazón cuando en bajel tuvo que partir
“lágrimas
en tu siembra”
en la tierra
en el viento
en el mar
en el cosmos
para que siempre brote la cosecha de amor
Y aun cuando me siento cobijado
por una humedad de melancolía
lágrimas que amamantan mis ojos
en mis manos en mi corazón
en mi alma donde está la suya
bajo la sucesión de las estaciones
primavera
verano
otoño
invierno
sostengo firme su amor
su propia historia que hizo
contra la que le obligó partir
su risa que me alumbra
que me cobija en calor
junto a la flor azucenas
para que sigan floreciendo
fundando florestas
que llaman a la polinización de la vida
para una permanente fecundación
de ese corazón que junto sembramos
y en él y con él seguiré viviendo
hasta ese feliz término del ciclo natural
y después en el cosmos junto a ella
