Antes, muchísimo antes
solía oír una frase común
¡soñar no cuesta
nada!
y apenas si la percibía
pero el tiempo pasa
y continúa oyéndose
¡soñar, soñar no
cuesta nada!
y ahora, me pongo a soñar y
lucho vivir como
en el sueño
Y de ese país del
alma
entre las nubes preñadas
de cristales-aguas grisazules
envuelta en azul un recuerdo
forcejeando entre suspiros…
viajando en aquel veloz avión
y frente a mí el pequeño monitor
10000, 8000, 5000, 3000, 2000 metros
ya planeando el momento del descenso
e imagino aquella ancha cinta gris como
brazos abiertos entre risas que esperan
cuando de improviso como una aparición
veo por mi ventanilla aquel bello cisne
majestuoso blanco inmaculada blancura
¡oh, qué dignidad luce por vivir libre!
Ver aquel cuerpo oval hecho de nieve volando
parecido a un sueño acabando hacerse real
y en abrupto contraste en ruptura siento
al hombre saliendo de su jaula inmaterial
su existencia de siglos por los siglos amén
y conjugarse en los verbos volar amar vivir
que recuerda a su ser cósmico como estrella
¡oh cisne realidad cósmica volando!
porque él es cisne pero más allá que cisne
irradiando alegría libertad belleza verdad
sabiendo que es cisne porque vive la vida
Y sentí dentro querer ser como ese cisne
y también volar volar con esa dignidad
que va manando sus atributos cósmicos
¡oh hombre hecho de átomos de estrellas!
¿por qué te desvestiste de tu traje cósmico?
¿cómo cambias aquella vida que construía
por ésta donde asesinas depredas mientes
donde es más el sufrimiento que la alegría?
¡tú misión
construir tu propio universo sobre
el lugar cósmico
que el universo te entregó!
¡Oh necesidad renacer para que tú renazca!
2000, 1500, 1000 ms. e imperturbable
la serena voz “abróchense
el cinturón”
el viento libre o el impulso interior
fuerte en el pecho corta los suspiros
pero ¿por qué no ser como él? ¡serlo! y
un surrealismo celeste me viste de magia
ahora mi cuerpo también luce con alas
y salgo a volar volar me veo volando y
le alcanzo tocando sus alas con las mías
y lo siento irradiando flujos de alegrías
también yo vuelo hinchado de alegrías